viernes, 11 de junio de 2010

Prohíben farras de pendex en viviendas particulares

  • Por unanimidad, la Junta Municipal de Asunción pidió a la capeta Evanhy de Gallegos para que rechaze cualquier solicitud de fiesta de colegio en casa particular.
En un intento por aplicarle una regulada mbarete a los excesos con bebidas alcohólicas, a las garroteadas entre “barras jodidas” de estudiantes al término de fiestas de colegio, así como a todas las barbaridades asociadas a esos desenfrenos, la Junta Municipal de Asunción decidió el miércoles último encomendar a doña Evanhy de Gallegos, la capeta de la comuna capitalina, para que ya no se autorice la realización de ninguna farra estudiantil en cualquier residencia particular.

La medida responde a que las casas no cuentan con sistemas de prevención de incendios, ni con salidas de emergencia. Además, las viviendas normalmente no tienen cobertura acústica para evitar la polución sonora (el ruidazo de los bafles) y no están preparadas para gran cantidad de asistentes. Y, el principal problema, es difícil controlar la venta de bebidas alcohólicas a menores de edad.

“Yo estoy en esta lucha desde hace dos años. Al principio, era como una pelea solitaria, pero, ahora todas las bancadas apoyan esta iniciativa”, dijo ayer la concejala patriaqueridista Miriam Ferreira, quien impulsó la presentación de la medida. Añadió también que está apurando el estudio de un proyecto de ordenanza municipal para regular el tema de las fiestas estudiantiles en viviendas, cuya presentación ante la Junta Municipal de Asunción sería la semana próxima.

Excesos. En los últimos meses, se escucharon todo tipo de barbaridades y excesos que los pendex estarían llevando a cabo en sus festicholas, las cuales se hacen para recaudar platita, ndaje. Los famosos shows eróticos para los muchachos o las chicas y la canilla libre de alcohol de alto voltaje, así como el peligro de la distribución de drogas, le quitaban el sueño a los papás.

El tema estaba tan denso que la Federación de Asociación de Padres de Alumnos de Instituciones Educativas del Paraguay (Fedapar) y otras instituciones sensibles al problema pegaron el grito al cielo y consiguieron la atención de las autoridades. Ahora ya se hace un control de los farras de los adolescentes.

Sorpresa

En relación con las farrucas de los pendex, el titular de Fedapar, Mario Fernández, dijo ayer en un medio radial que los esfuerzos están dando resultados. “Hemos logrado la concientizacion de muchos padres para que apoyen a sus hijos y de los propios estudiantes. Salimos a recorrer las fiestas estudiantiles (el sábado pasado). Nos fuimos a tres fiestas. Y nos encontramos con la sorpresa de que los chicos estaban totalmente sanos”, he’i voi el karai.

En Bolivia son más duros

El problema de los pendex que le dan al trago no es solo paraguayo. En Bolivia, por ejemplo, el gobierno prohibió “totalmente prohibido el desarrollo de fiestas en los establecimientos educativos”. La resolución se tomó en marzo de este año. “No se permitirá fiestas de ningún tipo como bautizo de mamaderas, fiestas de bienvenida y otros con fines de recaudar fondos para las promociones u otras actividades propias de cada establecimiento”, he’i voi el capo boliviano Evo Morales. La medida fue tomada con el fin de precautelar la salud y la integridad de los estudiantes, ndaje.

Lista de locales inhabilitados

La Muni de Asunción publicó ayer en su sitio de Internet una lista señalando cuales son los locales inhabilitados para funcionar. En esos lugares, vuelta y vuelta se hacen las fiestas de colegio. La lista negra incluye a las Discotecas May-b y Vangu, así como a locales denominados Venecia Eventos y Mastra Eventos.

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