Anciano abandonado por cuatro de sus seis hijos

• El señor está ciego, tiene hernia y problemas de próstata
• Para empeorar, la hija que lo tiene en su casa enfermó de cáncer y, tras la terapia, se quedó sin un peso para costear las cirugías a las cuales tiene que someterse el abuelito.

Alberto Cazal, 80, nacido y criado en la hermosa San Jose de los Campos Limpios del Tapua, o lisa y llanamente “Limpio”, peleó muchas y diferentes batallas a lo largo de su vida, como todo el mundo. Tuvo que enfrentar la dureza de ser pobre y trabajar de sol a sol para hacerse un lugarcito en la vida. Después, con su esposa Ramona Riquelme, hoy de 75 años, tuvieron 6 hijos. La buena fortuna lo hizo heredar de sus padres un terreno de 8 has. que va desde la Ruta 3 hasta el Río Salado. Y cuando él creyó que llegó el momento apropiado repartió proporcionalmente su propiedad entre cada uno de sus retoños.

Pero desde hace unos doce años, el destino le viene planteando al increíblemente sonriente abuelo un desafío diferente, de esos que uno sabe bien que no los podrá sortear, aunque eso no significa necesariamente rendirse. “Mi papá esta ciego desde antes del 2000, ahora tiene una hernia en su vientre que tiene que operarse sí o sí y también tiene que sacarse su próstata. Pero yo sola no tengo dinero para financiar ese gasto y tres de mis hermanas y mi hermano prácticamente le abandonaron a papá”, explicó ayer Julia Cazal, hijo de don Alberto. Ellos viven en una casita en el barrio San Salvador, de Limpio.

Y hay más. La mujer continuo diciendo que el cáncer en los ovarios que se le diagnosticó hace dos años no solo le consumió todas sus reservas monetarias, sino también sus fuerzas. Llegó a extirparse los órganos mencionados, ya aguantó 4 cirugías, pasó por radioterapia, quimioterapia. Pero aún así, ella sola es prácticamente quien se hizo cargo del cuidado de su papá, ya que – siempre según ella – sus hermanas Venancia, Anuncia y Esperanza, así como su hermano Mario no quieren saber nada del problema que atraviesa don Alberto.

Ante tal situación, Julia Cazal realizó un llamado a sus hermanos para que se acerquen a asistir al papá mientras el señor todavía está con vida. Y también apeló a la única estrategia que tienen los pobres cuando las papas queman: la solidaridad de los otros. Para el domingo próximo organiza una rifa – 10 kilos de asado y una cabeza de vaca son los premios – para comenzar a recaudar un poquito de plata y así juntar el efectivo para la operación de su padre.

La frase

Nosotros no exigimos nada, pero como hijos, ellos tendrían que venir a visitarle por lo menos.
Julia Cazal, hija.

Pantallazo de las enfermedades de don Alberto

Ceguera. Comenzó como una simple carnosidad, pero por alguna razón no revelada el cuadro se agravó hasta que perdió completamente la vista.

Hernia abdominal. En el bajo vientre se aprecia a simple vista como los órganos internos de la barriga formaron dos protuberancias pronunciadas.

Próstata. Don Alberto tiene que extraerse ese órgano, el cual luego tiene que ser sometido a biopsia para determinar si es maligna o no.

Pensamiento positivo memete

“Yo trabajaba en una fábrica ahí en la costa del río y después me fui a trabajar en una curtiembre. El último trabajo que tuve fue en el frigorífico Guaraní. Yo me siento bien, estoy ciego, pero me siento bien. Cuando la gente me ve, no cree como me puedo mover tan bien todavía. Es cierto que necesito ayuda para caminar, pero aparte de eso estoy fuerte todavía”, comentó ayer don Alberto Cazal, momentos antes de que su hija lo ayudara a volver a su piecita para dormir.

Frases de la nieta, Adriana Rodríguez.

“En vida hay que hacer las cosas. No vale la pena llorar después. Con sus lágrimas no lo van a levantar cuando él ya no esté.”

“El necesita ahora que todos sus hijos estén unidos. En su momento él hizo todo por sus hijos. No merece que se le pague así.”

Frases de la hija, Julia Cazal.

“Cuando yo le llevo a papá al hospital, te quiero mostrar como todo el mundo le quiere. ¿Y sus otros hijos dónde están?”

“Esperamos la colaboración de la gente porque mis hermanas devolvieron todas las rifas. Dicen que tienen vergüenza de vender.”

Rifa pro cirugía

Premios. El primer premio son 10 kilos de asado y el segundo es una una cabeza de vaca.

Costo. Cada número cuesta un diez mil’i

Fecha. Este domingo 14 de marzo van a comenzar las actividades para recolectar la platita.

Teléfono para comprar. Las personas que quieran colaborar pueden adquirir un número llamando al 0985 317 511

Método. El primer número del primer sorteo de la quiniela del domingo mencionado.

Lugar. Casa de la familia Cazal, barrio San Salvador, Limpio, aproximadamente a la altura del Km 35 de la Ruta 3.

Perfil. Alberto Cazal.

Familia. Con su esposa Ramona Riquelme tuvieron 5 mujeres y un varón.

Trabajo. Según Julia Cazal, su papá trabajó toda su vida como jornalero.

Herencia. Recibió de sus padres un terrenazo de 8 has con vista al río Salado. Pero ya lo dio a sus hijos.

Club. El karai es fanático del Olimpia, dice que se prende a la radio cuando juega el franjeado.

Política. El color azul es el que mejor le queda. Don Alberto Cazal es chovy hasta los huesos.

Comida Predilecta. Poroto quesú con fideo y carne mejora todavía más su increíble buen humor.