Policía a punto de morir de cáncer en el cuello

• Por castigo recibido en colegio de sub oficiales.
• El joven de 24 años fue acusado de sustraer un pantalón deportivo.

Tres días después de ingresar al Colegio de Sub Oficiales Nº 11 de la Policía Nacional, Derlis Mercado, 24, vio abruptamente terminadas sus esperanzas de algún día llegar a formar parte activa de esa fuerza pública, tal como es tradición en su familia, ya que varios de sus parientes y familiares más cercanos son agentes policiales en actividad. El joven fue acusado de robar un pantalón deportivo, tipo buzo – valor de mercado: 20 mil guaraníes – y, por ese motivo, fue castigado salvajemente por un sub oficial que estaba de guardia, según denunció ayer su hermano, Roberto Mareco. Ese castigo habría generado un linfoma maligno en el cuello del joven, hecho que ahora pone en peligro su vida.

Los Mareco son oriundos de Santa Rosa del Aguaray, departamento de San Pedro, y gastaron lo que no tenían para permitir que el joven Derlis cumpliera su sueño de ser Policía. Corría el mes de abril del 2008 y, en ese entonces, ellos ni imaginaba que terminarían aplanando pasillos de hospitales peleando por la vida del aspirante a sub oficial. “Mi hermano ya no puede caminar solo. Según los doctores ndo rekoveima vida ha’e. Y nosotros no vamos a dejar de balde esto. No vamos a callarnos”, afirmó Roberto.

Aquel día, Derlis fue acusado del robo de un buzo y, como castigo, habría sido golpeado por el sub oficial Julio Zelaya, quien habría seguido órdenes del oficial Elías Cardozo, según aseguró ayer Roberto Mareco. El afectado, Derlis Mareco abandonó el colegio de sub oficiales tres meses después y comenzó un tratamiento en el Policlínico Policial. El diagnóstico no tardó mucho: linfoma maligno.

Lo dijo

“Estoy peleando por mi vida. Quiero que se haga justicia. Confío en esto no quedará de balde.”

Derlis Mareco
Víctima

Testigos

Roberto Mareco, hermano de Derlis, no tiene dudas respecto a la historia que relata. “Tengo 80 testigos que vieron lo que pasó. Todos los camaradas de mi hermano estaban en la formación cuando a él le sacaron de ahí y le llevaron a la guardia. Le pegaron durante una hora, especialmente enla garganta”, afirma sin dudar Mareco.

Gastaron
casi toda
su plata

“Hasta ahora ya gastamos unos 120 millones de guaraníes. Mi papá vendió 26 Hás. de un terreno que tiene sobre la ruta en Nueva Germania y yo vendí 5 Hás., aquí en San Pedro. Además, tuvimos que juntar entre todos y vender 40 cabezas de ganado. Rosoma ko’anga”, mencionó en otro momento Roberto Mareco.
Añadió que tal vez se equivocaron por callarse tanto tiempo, pero que ahora decidieron hablar y solo piden ayuda y justicia. “Ayuda en cualquier cosa porque nos estamos quedando sin nada y justicia, en el sentido de que quienes le hicieron esto a mi hermano vengan a conversar con nosotros”, dijo finalmente Mareco, quien también reiteró varias veces que no busca venganza.